Los vecinos de Orihuela Costa vuelven a estar de luto tras la muerte de un niño británico de nueve años tras un accidente en la playa de La Zenia la noche del martes. El niño, vecino de la zona, jugaba al fútbol cuando cayó al suelo tras chocar con un amigo.  

Mientras los ciudadanos intentaban reanimar al niño, se llamó al 112. Primero llegó una patrulla de la Policía Local, tras lo cual llegaron agentes de la Guardia Civil, que continuaron con las maniobras de reanimación cardiopulmonar.

La primera ambulancia llegó 25 minutos después de recoger a un médico en el Centro Médico de Cabo Roig, pero solo contaba con soporte vital básico. El médico y el equipo médico se encargaron de la reanimación, pero el niño parecía no responder. Una segunda ambulancia, también con soporte vital básico, llegó poco después.

Mientras continuaban los intentos de reanimación los sanitarios confirmaron que el niño estaba fibrilando pero no fue hasta el minuto 40 que llegó una ambulancia del SAMU con el equipo médico adecuado.

El personal sanitario continuó con los intentos de reanimar al niño durante casi una hora y al parecer encontraron un pulso muy débil, momento en el que decidieron trasladarlo al Hospital Quirón de Torrevieja, donde un helicóptero medicalizado lo trasladó, aún en estado crítico pero aún con vida, al Hospital General de Alicante.

Desafortunadamente, al estar en coma inducido por la falta de oxígeno al cerebro, sus esfuerzos resultaron en vano ya que el niño falleció el miércoles por la tarde aproximadamente a las 5:XNUMX p. m.

Ahora que las investigaciones están en marcha, la pregunta que se plantea es: ¿se podría haber salvado la vida del niño si hubiera habido atención médica adecuada disponible en ese momento?

Testigos afirman que la ambulancia del SAMU, que transportaba todo el material médico necesario para atender al niño y que habitualmente tiene base en Cabo Roig, se encontraba en Orihuela ciudad en el momento del accidente, donde atendía una emergencia médica rutinaria. Al recibir la llamada, tuvo que recorrer más de 40 km de regreso a Orihuela Costa.

Aunque el personal sanitario que atendió el accidente realizó todos los procedimientos disponibles, fuentes explicaron que las tres ambulancias del SAMU que habitualmente prestarían asistencia de emergencia entre Guardamar y Pilar de la Horadada, se encontraban fuera de sus bases prestando servicios no prioritarios.

Se sabe que amigos del fallecido y su familia, que llevaron flores al lugar del accidente como homenaje, se han quejado al Ayuntamiento de Orihuela por la falta de desfibriladores en Orihuela Costa, con su numerosa población residente.

En una acción inusual, el consejo emitió un comunicado de prensa a las 9 p. m. del miércoles por la noche ofreciendo sus condolencias a la familia del joven.

Tras relatar los hechos concluyeron diciendo “Lamentamos profundamente la pérdida del niño y transmitimos nuestras condolencias a su familia, al tiempo que solicitamos todo el rigor y prudencia ante las informaciones publicadas sobre este doloroso suceso”.

Hoy (jueves) se realizará la autopsia al cuerpo del joven antes de su funeral, que tendrá lugar en el Tanatorio de San Pedro.